apenas estás mirando una calavera polvorienta
el viejo submarino yace en el lecho entre algas
me hago mil preguntas me llegan mil respuestas
una no excluye las otras caras del poliedro
Me escuchan mil hijos que no conozco y los quiero
Todos van caminando hacia el norte según creo
no conozco el nombre de ninguno de ellos
es posible que vayan dibujando una elipse
de esta forma intuyo que algún día volverán