No disuelvas mi corazón
sé que estás al otro lado
y no me importa que la noche sea larga
el camino se vuelve pedregoso
y quiza tenga que contar las estrellas
hasta que se confundan con las luces del amanecer
cuando huela los buñuelos y el café caliente
no voy a dejar que suéne el teléfono
para que no interrumpa tu mejor sueño
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